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«¡Basta de igualdad! La mujer no puede ser soldado» – dice Capitán de los Marines

«Una mujer nunca debería ser soldado de infantería», escribió la Capitán de los Marines Katie Petronio en la revista «Marine Corps Gazette», según informó la agencia LifeSiteNews.

En el artículo titulado «¡Basta de eso! No fuimos creados todos iguales!», la Capitán defiende que la anatomía femenina no es capaz de resistir a las asperezas de la larga carrera militar que supone operaciones de infantería.

Ella advierte que los Fusileros Navales (Marines) sufrirán «un aumento colosal en el número de mujeres incapacitadas y obligadas a concluir su carrera por causas médicas».

Katie Petronio se basa en la experiencia personal, adquirida en combate. Esta terminó causándole serios daños físicos, a pesar de un promisorio comienzo en la élite de la oficialidad del arma.

La Capitán escribió que «tenía todas las condiciones» para ser una mujer-soldado ideal, cuando comenzó la carrera. «Yo era una estrella en el hockey sobre hielo en el Bowdin College, pequeña escuela de elite en Maine, con un título en Derecho y Administración».

También obtuvo resultados «de lejos sobre la media en todos los tests físicos de capacidad para mujeres», aunque no completó todo el entrenamiento previo.

«Cinco años después, no soy físicamente la mujer que fui una vez, y mis puntos de vista al respecto del éxito de una mujer en una carrera duradera en la infantería cambiaron mucho», escribió Petronio.

«Puedo decir, basada en mi experiencia personal directa en Irak y en Afganistán, y no sólo en una impresión, que aún no comenzamos a analizar y a comprender las cuestiones específicas de salud del género y los daños físicos en las mujeres causadas por las continuas operaciones de combate».

Petronio «participó en numerosas operaciones de combate» que a veces duraban semanas, sufriendo stress y falta de sueño.

Sus piernas comenzaron a atrofiarse, perdió movilidad y peso, y dejó de producir estrógenos, desarrollando un síndrome en el ovario que la dejó estéril.

Ela completó su periodo con buenos resultados, pero percibió que le sería imposible soportar el esfuerzo que un hombre es capaz de realizar y pidió su retiro por razones de salud.

Petronio manifestó su preocupación ante la presión de los grupos que impulsan la integración de mujeres en el cuerpo de infantería.

«¿Quién está promoviendo esa agenda? Personalmente no veo Marines femeninas, reclutas u oficiales, golpeando las puertas del Congreso, quejándose de que su impotencia para servir en la infantería viola el derecho a la igualdad», escribe.

Katie dijo que esa presión está siendo aplicada por el «pequeño comité de civiles nombrado por el Secretario de Defensa, denominado Comité Consultivo en Defensa para las Mujeres en Servicio (Defense Advisory Committee on Women in the Service – DACOWITS).

Aunque alguno de ellos tenga experiencia militar, ninguno de sus miembros «están en el servicio activo o tienen cualquier tipo de experiencia reciente en combate o en operaciones, relevantes sobre las realidades que ellos están tratando de modificar», observó Petronio.

La igualdad y la supresión de la religión

Para Karl Marx sólo la implantación de la igualdad completa, haría posible la desaparición de la concepción religiosa del mundo.

Las desigualdades y el conocimiento de Dios
Con las desigualdades, quiso Dios proveer al hombre con abundantísimos medios para tener siempre presente sus infinitas perfecciones.
Dios quiere las desigualdades armónicas

No quiso Dios que las desigualdades existieran solamente entre los seres de los reinos inferiores ‒mineral, vegetal y animal‒ sino también entre los hombres y, por lo tanto, entre los pueblos y naciones.

Con esas desigualdades, que Dios creó armónicas entre sí y bienhechoras, tanto para cada categoría de seres como para cada ser en particular, quiso Dios proveer al hombre con abundantísimos medios para tener siempre presente sus infinitas perfecciones.

La eliminación radical de las desigualdades conduce al comunismo

Las desigualdades entre los seres son, ipso facto, una sublime e inmensa escuela de antiateísmo.

Así parece haberlo comprendido el escritor comunista francés Roger Garaudy (posteriormente “convertido” al islamismo), al destacar la importancia de la eliminación de las desigualdades sociales para conseguir la victoria del ateísmo en el mundo:

Roger Garaudy, ex-miembro del Comité Central del PC francés

“Para un marxista, no es posible decir que la eliminación de las creencias religiosas es una condición sine qua non para la edificación del comunismo. Karl Marx mostraba, por el contrario, que sólo la completa realización del comunismo, tornando transparentes las relaciones sociales, haría posible la desaparición de la concepción religiosa del mundo.

Para un marxista es, pues, la edificación del comunismo la condición sine qua non para eliminar las raíces sociales de la religión, y no la eliminación de las creencias religiosas la condición para la construcción del comunismo. («L’homme chrétien et l’homme marxiste», Semaines de la pensée marxiste – Confrontations et débats, La Palatine, Paris -Généve, 1964. p. 64.)

El orden jerárquico y el amor de Dios

Querer destruir el orden jerárquico del Universo es, pues, privar al hombre de recursos para poder ejercer libremente el más fundamental de sus derechos: el de conocer, amar y servir a Dios; es decir, es desear la mayor de las injusticias y la más cruel de las tiranías.

Una superioridad social paterna

Los socialistas y ciertas “nuevas” derechas tienen como el punto más importante en todas las reformas legales que proponen esta erosión de las desigualdades legítimas.

Plinio Corrêa de Oliveira, Nobility and Analogous Traditional Elites in the Allocutions of Pius XII: A Theme Illuminating American Social History (York, Pensilvania. The American Society for the Defense of Tradition, Family, and Property, 1993), Documents V, p. 488).

Los revolucionarios de 1789 y los falsos profetas

Falsos profetas que ofrecían libertad igualdad y fraternidad

Eran profetas que proclamaban la libertad de hacer el mal, de llamar luz a las tinieblas, de confundir la mentira con la verdad, de preferir aquella a esta, de sacrificar al error y al vicio los derechos y las razones de la justicia y de la verdad

Lecciones de la Historia para nuestros días

En el siglo XIX aparecieron en Francia muchos falsos profetas que tomaban la actitud de reivindicadores de los derechos del pueblo, que ofrecían una era de libertad, igualdad y fraternidad. Esos profetas vestidos con piel de oveja, habrían de mostrarse en la realidad como lobos rapaces.

«Basta, en efecto, evocar en nuestra mente los principios del siglo XIX para distinguir que muchos falsos profetas habían aparecido en Francia y que, desde allí, se proponían extender por doquier la maléfica influencia de sus perversas doctrinas. Eran profetas que tomaban la actitud de reivindicadores de los derechos del pueblo, que preconizaban una era de libertad, de fraternidad, de igualdad. ¡Quién no los hubiera considerado vestidos con piel de oveja, ‘in vestimentis ovium!‘.

La labor de Marx: coaligar a los adeptos de la igualdad

«Pero la libertad preconizada por aquellos profetas no abría la puerta al bien, sino al mal; la fraternidad predicada por ellos no saludaba a Dios como el Padre único de todos los hermanos, y la igualdad anunciada por los mismos no se apoyaba en la identidad de origen, ni en la común redención, ni en el mismo último fin de todos los hombres.

«Eran -¡ay!- profetas que predicaban una igualdad destructora de la diferencia de clases por Dios querida en la sociedad; eran profetas que llamaban hermanos a todos los hombres para quitar la idea de sujeción de unos a otros; eran profetas que proclamaban la libertad de hacer el mal, de llamar luz a las tinieblas, de confundir la mentira con la verdad, de preferir aquella a esta, de sacrificar al error y al vicio los derechos y las razones de la justicia y de la verdad.

«No es difícil entender que esos profetas vestidos con piel de oveja, habrían de mostrarse intrínsecamente -esto es en la realidad- como lobos rapaces «qui veniunt ad vos in vestimentis ovium, intrinsecus autem sunt lupi rapacis» (que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces).

«Y no es de sorprender si contra tales falsos profetas debía resonar una palabra terrible: «¡guardaos de ellos!», «attendite a falsis prophetis!».

Benedicto XV, alocución del 11 de julio de 1920, al proclamar la heroicidad de las virtudes de San Marcelino Champagnat.

La obsesión por la Igualdad es loca, mala y muy peligrosa

En nombre de la Igualdad se subvierte las estructuras de la sociedad
«Les dije que no creía que fuera un avance para la civilización humana que las mujeres abandonen su tradicional asociación con la paz y comiencen a matar gente como los hombres»

En un artículo publicado en «The Daily Telegraph» el periodista Charles Moore hizo, tiempo atrás, un análisis de las consecuencias a que conduce la nueva super-ideología de nuestro tiempo: la igualdad.

Reproducimos aquí sus ideas principales sobre la igualdad, esta super-ideología de nuestro tiempo.

«Esta gran doctrina de nuestro tiempo es promovida por todos los medios ‒pero reduce nuestras libertades

Un debate sobre la Igualdad

“La semana pasada, asistí a un debate en el panel de la BBC “Any Questions?” en Guildford. Me preguntaron si pensaba que las mujeres deben poder participar completamente en las funciones de combate de primera línea en las Fuerzas Armadas.

Les dije que no creía que fuera un avance para la civilización humana que las mujeres abandonen su tradicional asociación con la paz y comiencen a matar gente como los hombres.

“Esto no fue del agrado de quien hizo la pregunta, un estudiante inteligente del departamento de política de la Universidad de Surrey, ni de sus partidarios que lo acompañaban.

Ellos pensaban que la única cuestión en debate era la capacidad de la mujer: si estaba en condiciones de luchar, luchar cuando quiera, y que nadie debe impedírselo.

“Después reflexioné sobre lo extraño de la situación. No parecía que el estudiante y sus colegas estuvieran especialmente interesados ​​en los asuntos militares en sí mismos. Igualmente, no parecían del tipo de personas que, en otras circunstancias, estarían interesados en absoluto ​​en matar gente. Podía imaginarlos protestando contra el militarismo. Sin embargo, allí estaban, presionando en favor del derecho de la mujer a matar.

“¿Por qué? Debido a la Igualdad, por supuesto. Esta te pone en situaciones extrañas.

“Escribí Igualdad con “I” mayúscula porque, más de lo que pensamos, se ha convertido en la doctrina pública de nuestro tiempo.

“Si Usted cree en esa Igualdad con “I” mayúscula, no está diciendo simplemente, como lo haría la mayoría de la gente, que se debe tratar de hacer la vida más justa para todos.

«Usted está haciendo de la Igualdad el principio que todo lo conquista en la organización social y la vida humana.

La Igualdad, una especie de religión

“Es como una religión, pero, a diferencia de las religiones actuales en Occidente, está respaldada por la fuerza de la ley.

«Desde 2009, cuando la Ley de Igualdad de los Laboristas consolidó todos los proyectos anteriores de la legislación, se han producido, por así decir, siete canales de la Igualdad, equivalentes a los siete sacramentos de la Iglesia Católica.

«Ellos son: raza, edad, discapacidad, orientación sexual, género, cambio de sexo y religión o creencia en sí. A través de estos siete canales, la gracia de Igualdad debe ser vertida.

En nombre de la Igualdad, el «matrimonio» homosexual
Charles Moore explica que la igualdad socava la libertad atacando las formas de vida que la gente ha desarrollado por sí misma, a menudo usando la ley e incluso a la policía para hacerlo

“Cuando David Cameron comenzó a impulsar el matrimonio homosexual, probablemente vio esto como una simple cuestión de ser amable con los homosexuales y hacer parecer a los Tories menos desagradables.

«Pero ahora que el Gobierno lo ha trasladado a la legislación, y se debatirá el proyecto de ley en el Parlamento el martes, está bien y verdaderamente atrapado por la Igualdad.[1]

“En los últimos meses, los redactores del proyecto de ley han luchado por cumplir el objetivo de la Igualdad, al posibilitar que el matrimonio del mismo sexo sea idéntico al matrimonio, tal y como el mundo lo ha conocido durante la mayor parte de la historia de la humanidad.

Ellos han franqueado una barrera intrasponible. Hay cosas que no se pueden hacer.

“Los redactores se dieron cuenta tardíamente de que, puesto que no hay ningún acto procreador que defina el comportamiento homosexual, no puede haber consumación ni no consumación, y por lo tanto no existe el adulterio.

El igualitarismo explicado en toda su profundidad

Este no será, por tanto, motivo de divorcio homosexual.

«Nada de sexo por favor, somos homosexuales.»

«Así es que lo que han acabado ofreciendo, por extraño que parezca, es una ley de matrimonio, sin cualquier elemento sexual. Esto nunca ha sucedido antes. No hay nada en la nueva ley del Señor Cameron que diga que el matrimonio homosexual debe ser entre homosexuales. Si yo fuera soltero, podría casarme con un amigo varón heterosexual sólo para obtener ventajas fiscales, ofertas de viajes y descuentos de seguro.

“Este es el punto real sobre la Igualdad. Debido a que en la actualidad se considera tanto un principio sagrado como jurídico, es el cielo en la tierra para los abogados, pero para ninguna otra persona.

Una persecución religiosa

“Esto a su vez significa que las promesas del Sr. Cameron, a pesar de sinceras, de que las objeciones religiosas al matrimonio del mismo sexo serán protegidas por la Ley, no se podrán cumplir.

«Aunque la religión es uno de los siete «capítulos» de la Igualdad, es sólo una, y no es más importante que el cambio de sexo en el gran esquema de la Igualdad.

«Y así, a pesar de que, en virtud de la nueva ley, un sacerdote es libre para casar sólo a personas del sexo opuesto, si él es también capellán de un hospital, éste probablemente tendrá el derecho de despedirlo porque sus puntos de vista «homofóbicos» sobre el matrimonio rompen su «deber público de Igualdad del sector», que la Ley de Igualdad establece.

«Por principios similares, no será permitido a una Iglesia que contrate una sala pública, debido a sus puntos de vista sobre el matrimonio, y un maestro cristiano, judío o musulmán podrá ser despedido por negarse a enseñar que el matrimonio es lo que dice la Ley de Igualdad.

“Ninguno de estos resultados es seguro. Pero lo cierto es que esas cosas serán legalmente impugnadas, que será caro, agotador y peligroso, y que, siendo llevado el asunto a la CEDH (Corte Europea de Derechos Humanos), los denunciantes podrán recurrir a una instancia donde las promesas del Sr. Cameron son nulas.

Frutos de esta mal entendida Igualdad

“Si nos detenemos para ver cómo funciona la Igualdad, nos daremos cuenta de tres cosas.

“Uno, es que socava la libertad.

«Ella se especializa en atacar las formas de vida que la gente ha desarrollado por sí misma, a menudo usando la ley e incluso a la policía para hacerlo.

“La segunda, es que socava las instituciones. Los baluartes de una sociedad libre no son individuos atomizados, sino empresas, familias, escuelas, clubes, iglesias, organizaciones benéficas, equipos deportivos. La Igualdad es un instrumento del Gobierno para nacionalizarlos.

“La tercera, es que la Igualdad hace a todo el mundo muy infeliz (con excepción de los abogados y otros activistas). Nadie sabe qué ley podría estar violando sin darse cuenta, qué comentario «inapropiado» podría haber hecho. Y aquellos que invocan la Igualdad, para hacer avanzar su causa, lejos de estar satisfechos con lo que han ganado, están en un estado semi-permanente de rabia contra cualquier imperfección restante.

«Ellos están entrenados para identificar acusaciones, así es que naturalmente se consideran maltratados».


[1] El proyecto fue aprobado en la Cámara de los Comunes por 400 a 175. Después debía ser votado en la Cámara de los Lords.

Filósofo inglés: “¿La ley sobre la homofobia? Como los procesos de Mao”

El más célebre pensador conservador de Inglaterra

“George Orwell ya dijo todo en sus famosos ‘dos minutos de odio’ de la novela ‘1984’”, dice al Foglio (www.ilfoglio.it) el filósofo y comentarista inglés Roger Scruton.

“La cuestión homosexual es complicada y difícil, pero no puede encarcelar el pensamiento con leyes sobre la denominada ‘homofobia’ como la del Parlamento italiano, que lo único que hace es criminalizar la crítica intelectual sobre el matrimonio homosexual. Es un nuevo crimen intelectual, ideológico, como fue el anticomunismo durante la Guerra Fría”.

Roger Scruton contra matrimonio homosexual
El filósofo Roger Scruton no se pliega al pensamiento único ni a los trucos de lenguaje de los lobbies progresistas

Docente de Filosofía en la St. Andrews University, setenta años, autor de una treintena de libros que le han convertido en el más célebre filósofo conservador inglés (ha sido definido por el Sunday Times “the brightest intellect of our time”, “la mente más brillante de nuestro tiempo”), Scruton comenta de este modo la ley que se está debatiendo en el Parlamento italiano sobre la criminalización de la “homofobia”.

«También Amnistía Internacional se está movilizando en apoyo de esta ley.

Como los juicios-farsa y el maoísmo

“Esta ley sobre la homofobia me recuerda a los juicios farsa-espectáculos de Moscú y de la China maoísta, en los que las victimas confesaban con entusiasmo sus propios crímenes antes de ser ajusticiados.

«En todas estas causas en las que los optimistas acusan a los opositores de ‘odio’ y ‘discurso del odio’ veo lo que el filósofo Michael Polanyi definió, en 1963, como ‘inversión moral’: si desapruebas el welfare (el bienestar social) te falta ‘compasión’; si te opones a la normalización de la homosexualidad eres un ‘homófobo’; si crees en la cultura occidental eres un ‘elitista’. La acusación de ‘homofobia’ significa el final de la carrera, sobre todo para quien trabaja en la universidad”.

Distorsionan el lenguaje: vuelve Orwell

Scruton sostiene que la manipulación de la verdad pasa a través de la distorsión del lenguaje, como en la obra de Orwell, con el nombre de “Neolengua”.

La neolengua interviene cada vez que el propósito principal de la lengua, que es describir la realidad, es sustituido por el propósito opuesto: la afirmación del poder sobre ella.

«Aquí, el acto lingüístico fundamental coincide sólo superficialmente con la gramática asertiva. Las frases de la neolengua suenan como aserciones en las cuales la única lógica subyacente es la de la fórmula mágica: muestran el triunfo de las palabras sobre las cosas, la futilidad de la argumentación racional y el peligro de resistir al encantamiento.

«Como consecuencia, la neolengua desarrolla una sintaxis especial que, si bien está estrechamente conectada a la que se utiliza normalmente en las descripciones ordinarias, evita con cuidado rozar la realidad o confrontarse con la lógica de la argumentación racional.

«Es lo que Françoise Thom ha intentado ilustrar en su estudio, ‘La langue de bois’ (Literalmente, “La lengua de madera”. Es una expresión francesa que designa una forma de expresión que esconde la realidad jugando con los sentimientos de quien escucha).

«Thom ha puesto de relieve algunas de sus peculiaridades sintácticas: el uso de sustantivos en lugar de verbos directos; la presencia de la forma pasiva y de la construcción impersonal; el uso de comparativos en lugar de predicados; la omnipresencia del modo imperativo”.

La «homofobia», un fantasma

Con la ley sobre la homofobia, Scruton dice que

“se intenta infundir en la mente del público la idea de una fuerza maligna que invade toda Europa, albergándola en los corazones y en la cabeza de la gente que ignora sus maquinaciones, y dirigiendo hacia el sendero del pecado incluso el proyecto más inocente.

«La neolengua niega la realidad y la endurece, transformándola en algo ajeno y resistente, algo ‘contra lo que luchar’ y a lo que ‘hay que vencer’. El lenguaje común da calor y ablanda; la neolengua congela y endurece. El discurso común genera, con sus mismos recursos, los conceptos que la neolengua prohíbe: correcto-incorrecto; justo-injusto; honesto-deshonesto; tuyo-mío”.

Una forma de “reeducación”

Scruton dice que se está expandiendo en los países europeos el miedo a la herejía.

“Está emergiendo un sistema considerable de etiquetas semioficiales para prevenir la expresión de puntos de vista ‘peligrosos’. La amenaza se difunde de manera tan rápida en la sociedad que no es posible evitarla.

«Cuando las palabras se convierten en hechos, y los pensamientos son juzgados por la expresión, una especie de prudencia universal invade la vida intelectual».

Como los procesos de Mao
La homofobia me recuerda a los juicios farsa-espectáculos de Moscú y de la China maoísta

Y detalla más lo que pasa cuando se habla con miedo:

«La gente modera el lenguaje, sacrifica el estilo a una sintaxis más ‘inclusiva’, evita sexo, raza, género, religión. Cualquier frase o expresión que contenga un juicio sobre otra categoría o clase de personas puede convertirse, de la noche a la mañana, en objeto de estigmatización.

«Lo políticamente correcto es una censura blanda que permite mandar a la gente a la hoguera por pensamientos ‘prohibidos’. Las personas que tienen un ‘juicio’ son condenadas con la misma violencia de Salem”. El del juicio a las brujas, en Massachusetts[1]. La letra escarlata[2].

Quien disienta del lobby gay será «homófobo»

“Quien se angustie por todo esto y quiera expresar su protesta deberá luchar contra poderosas formas de censura. Quien disienta de lo que se está convirtiendo en ortodoxia en lo que respecta a los ‘derechos de los homosexuales’ es regularmente acusado de ‘homofobia’.

«En Estados Unidos hay comités encargados de examinar el nombramiento de los candidatos en el caso de que exista la sospecha de ‘homofobia’, liquidándolos una vez que se ha formulado la acusación: ‘No se puede aceptar la petición de esa mujer de formar parte de un jurado en un juicio, es una cristiana fundamentalista y homofóbica’”.

Según Scruton, se trata de una operación ideológica que recuerda, exactamente, la que tuvo lugar durante la Guerra Fría.

“Entonces se necesitaban definiciones que estigmatizaran al enemigo de la nación para justificar su expulsión: era un revisionista, un desviacionista, un izquierdista inmaduro, un socialista utopista, un social-fascista.

«El éxito de estas ‘etiquetas’ marginando y condenando al opositor corroboró la convicción comunista de que se puede cambiar la realidad cambiando el lenguaje: por ejemplo, se puede inventar una cultura proletaria con la palabra ‘proletkult’; se puede desencadenar la caída de la libre economía simplemente declarando en voz alta la ‘crisis del capitalismo’ cada vez que el tema es debatido; se puede combinar el poder absoluto del Partido Comunista con el libre consentimiento de la gente definiendo al gobierno comunista como un ‘centralismo democrático’.

«¡Qué fácil ha sido asesinar a millones de inocentes visto que no estaba sucediendo nada grave, pues se trataba solamente de la ‘liquidación de los kulaki’[3]!

«¡Qué fácil es encerrar a la gente durante años en campos de trabajo forzado hasta que enferma o muere, si la única definición lingüística concedida es ‘reeducación’!. Ahora existe una nueva beatería laica que quiere criminalizar la libertad de expresión sobre el gran tema de la homosexualidad”.

Dicen «nosotros»… y son sólo los progres

Por último, dice Scruton, tenemos el choque entre el “pragmatista” y el “racionalista”.

Las viejas ideas de objetividad y verdad universal ya no tienen ninguna utilidad, lo único importante es que ‘nosotros’ estemos de acuerdo.

«Pero, ¿quién es este ‘nosotros’?¿Y sobre qué estamos de acuerdo? ‘Nosotros’ estamos todos a favor del feminismo, somos todos liberales, defensores del movimiento de liberación de los homosexuales y del currículum abierto; ‘nosotros’ no creemos en Dios o en cualquier otra religión revelada, y las viejas ideas de autoridad, orden y autodisciplina para nosotros no cuentan».

Y continúa:

«Nosotros decidimos el significado de los textos, creando con nuestras palabras el consentimiento que nos gusta. No tenemos ningún vínculo, sólo el que nos une a la comunidad de la que hemos decidido formar parte, y puesto que no existe una verdad objetiva, sino sólo un consentimiento autogenerado, nuestra posición es inatacable desde cualquier punto de vista fuera de ella. El pragmatista no sólo puede decidir qué pensar, sino que también se puede proteger contra cualquiera que no piense como él”.

Giulio Meotti / Foglio Quotidiano—

(Traducción de Helena Faccia Serrano)


[1] El autor hace referencia a los juicios por brujería de Salem, en Massachusetts (EE.UU.), una serie de audiencias locales, posteriormente seguidas por procesos judiciales formales, llevados a cabo por las autoridades con el objetivo de procesar y después, en caso de culpabilidad, castigar delitos de brujería en los condados de Essex, Suffolk y Middlesex, entre febrero de 1692 y mayo de 1693. Este acontecimiento se usa de forma retórica en la política como una advertencia real sobre los peligros de la intromisión gubernamental en las libertades individuales, en el caso de acusaciones falsas, de fallos en un proceso o de extremismo religioso. (N.d. T.)

[2] El autor hace referencia a la novela de Nathaniel Hawthorne, “La letra escarlata”, publicada en 1850. Ambientada en la puritana Nueva Inglaterra de principios del siglo XVII, relata la historia de Hester Prynne, una mujer acusada de adulterio y condenada a llevar en su pecho una letra «A», de adúltera, que la marque.

[3] La «liquidación de los kulaks como una clase social», o deskulakización, fue anunciada oficialmente por Iósif Stalin el 27 de diciembre de 1929. Fue la campaña soviética de represión política contra los campesinos más ricos o kulaks y sus familias; entre arrestos, deportaciones y ejecuciones, afectó de manera muy grave a millones de personas en el período 1929-1932.