Otro hermoso testimonio de una joven madre que demuestra de modo profundo el coraje de la maternidad. Ana padece de una de las “causales” que señala el protocolo de aborto terapéutico. Ella padece de lupus eritematoso sistémico, la octava causal. Hoy se muestra agradecida a Dios y a quienes la apoyaron por haberla sostenido para seguir adelante con sus dos embarazos. Ana ha querido compartir su testimonio con ustedes, especialmente con las madres, para darles esperanza que quienes sufran algo parecido, sigan adelante, y señalar lo peligroso que es tener un protocolo que permita a alguien decidir quién debe vivir o no.
Testimonio de Ana : “Tengo dos milagros que caminan de mi mano”
Mi nombre es Ana, quería compartir el testimonio de la vida de mis hijos… Yo tengo hace 12 años una enfermedad crónica, Lupus Eritematoso Sistémico con compromiso de órgano (riñones): 8va causal en el Protocolo del Aborto Terapéutico y en teoría no “debería” tener hijos.
Quedé embarazada de Juan Andrés, fue un embarazo de alto riesgo para él y para mí y muy complicado… tuve varias infecciones urinarias altas, entre otras complicaciones renales…. estuve hospitalizada y en reposo absoluto un mes antes de que me hicieran una cesárea de emergencia a la semana 31 de embarazo porque mi bebé tenía RCIU (retardo en el crecimiento intrauterino)…
Juan Andrés pesó al nacer 1.460 kg, no tenía el reflejo de succión y lo alimentaban por sonda, pero no necesitó oxígeno para respirar porque me pusieron unas inyecciones para madurarle los pulmones antes de tiempo. Estuvo en la incubadora solo 15 días, fui mamá canguro y al principio le daba mi leche con gotero… Ahora tiene 5 años está muy bien.
María Paz nació 1 año y 3 meses después que Juan Andrés, los médicos casi me matan cuando quedé embarazada, incluso mencionaban el aborto terapéutico. Menos mi médico de cabecera que me dijo que todo saldría bien. También fue un embarazo de alto riesgo para mí…
María Paz nació también prematura por cesárea de emergencia, porque también tenía RCIU, a las 33 semanas y pesó 2 kg…Ella no tuvo ningún problema, estuvo en la incubadora solo 3 días, también hice mamá canguro con ella… Hoy tiene 4 años y es una niña muy feliz, alegre e inteligente.
Después de la segunda cesárea mandaron mi placenta a patología, y como resultado: había tenido varios infartos (por lo que ya no alimentaba al bebé), oligohidroamnios (disminución de la cantidad de líquido amniótico), etc… todo esto por el lupus…
Ha sido complicado, doloroso… pero no me arrepiento ni un segundo de haber pasado por todo eso…
Es verdad que mis riñones sufrieron en los embarazos y empeoró un poco la condición que tenía; pero gracias a Dios y los avances de la medicina, estoy muy bien,
puedo cuidar de mis hijos y disfrutar cada día con todo lo que hacen y aprenden.
Siempre digo que yo veo claro el amor de Dios porque tengo dos milagros que caminan de mi mano y por eso defiendo la vida.
Gracias,
Ana
Mi Torre y Atalaya 